Candidiasis

7 abril 2025

Candidiasis de repetición: lo que realmente necesitas saber

Si sufres de picor vaginal crónico y has pensado que podría deberse a una candidiasis recurrente, este post es para ti. Hay mucha información errónea circulando sobre las infecciones por hongos, así que vamos a desglosar lo que realmente sabemos y lo que la ciencia respalda.

¿Es realmente candidiasis?

Es comprensible pensar que el picor vaginal es sinónimo de candidiasis, especialmente si has leído que la secreción blanca y espesa es una señal inequívoca de infección. Pero aquí va una verdad clave: el aspecto del flujo vaginal no es un criterio fiable para diagnosticar candidiasis. Puedes tener una infección severa sin apenas secreción o tener una gran cantidad de flujo blanco y grumoso sin que haya infección por hongos.

De hecho, cerca del 50% de las personas que se autodiagnostican candidiasis están equivocadas. Esto se debe a que los síntomas pueden confundirse con otras condiciones, como la vaginosis bacteriana, el liquen escleroso o incluso el eccema vulvar.

Claves para un diagnóstico preciso

Diagnosticar candidiasis basándose solo en los síntomas o el aspecto del flujo no es suficiente. El método más fiable para diagnosticar una candidiasis es un cultivo vaginal. Este análisis permite confirmar la presencia de hongos y determinar el tipo exacto, lo que es crucial si el problema se repite.

Si tienes infecciones recurrentes, es imprescindible hacer un cultivo antes de seguir con tratamientos antifúngicos. En algunos casos, el problema no es la candidiasis en sí, sino una alteración en el equilibrio del ecosistema vaginal o una afección cutánea subyacente.

Es fundamental hacer seguimiento. A las 4 semanas, si la paciente no ha mejorado al 100%, es necesario reevaluar. En este punto hay dos posibilidades:

  • El hongo es resistente al tratamiento. El cultivo será positivo y se deben hacer pruebas de sensibilidad para determinar el medicamento adecuado
  • El hongo nunca fue la causa de los síntomas o no los causaba completamente. Si el cultivo es negativo pero los síntomas continúan, entonces el problema es otro.

¿Por qué sigue volviendo la candidiasis?

Si realmente tienes candidiasis de repetición, hay varias razones por las que podría estar ocurriendo:

  1. El ecosistema vaginal no se ha restablecido por completo. Algunas personas tienen un microbioma vaginal más susceptible al crecimiento de hongos.
  2. Factores de riesgo subyacentes. La diabetes no controlada, el uso frecuente de antibióticos o problemas inmunológicos pueden hacer que los episodios sean más frecuentes.
  3. Resistencia a los antifúngicos. Algunas especies de Cándida son naturalmente resistentes al fluconazol y otros tratamientos comunes, lo que hace que la infección persista. En este caso, la infección nunca ha desaparecido porque el medicamento no ha funcionado. Algunos tipos de Candida son naturalmente resistentes a los antifúngicos orales y de venta libre, mientras que otras cepas pueden desarrollar resistencia con el tiempo. Para diagnosticar esto, se necesita un cultivo con pruebas de sensibilidad.
  • Si el cultivo muestra Candida kruseii, sabemos que el fluconazol no funcionará, pero el clotrimazol podría hacerlo.
  • Si el cultivo muestra Candida albicans (la causa más común de candidiasis), el laboratorio debe hacer pruebas para determinar qué medicamento será efectivo.

Una vez que tengamos estos resultados, podemos diseñar el tratamiento adecuado.

  1. Condiciones de la piel que facilitan la infección. Problemas como el liquen simple crónico o el liquen escleroso pueden alterar la barrera cutánea y facilitar la proliferación de hongos.


A veces puede ocurrir que se de una  afección de la piel y también una candidiasis.
Las enfermedades de la piel dañan la barrera cutánea, haciéndola más vulnerable a los hongos. Esto puede ser difícil de distinguir porque, en un momento dado, el 20% de las personas tienen hongos en la vagina sin síntomas. Es decir, un cultivo positivo no siempre indica una infección.

Una infección ocurre cuando el hongo crece en exceso y causa síntomas, pero un cultivo no puede diferenciar entre una colonización normal y una infección activa.

  • Si hay signos de inflamación vaginal, la candidiasis es más probable.
  • Si hay evidencia clara de un problema de la piel y un cultivo positivo para hongos, normalmente tratamos ambas cosas.

Tratamiento efectivo: más allá de los antifúngicos

Si se confirma una candidiasis recurrente, el tratamiento recomendado suele ser fluconazol en dosis supresiva, es decir, tomarlo de manera programada durante varios meses para evitar recaídas. Este protocolo ha demostrado ser efectivo para muchas personas.

Pero si el tratamiento no funciona, es fundamental reevaluar el diagnóstico: ¿Realmente es candidiasis o hay otra condición que está causando los síntomas?

Lo que NO funciona, o al menos, no hay gran evidencia científica

Hay muchos mitos en torno a la candidiasis. Aquí te dejamos algunas aproximaciones al tema, que no han demostrado tener una buena evidencia científica que las sustente….

  • La dieta no influye en la candidiasis. No hay evidencia de que eliminar el azúcar o ciertos alimentos ayude.
  • Los probióticos , de momento, no han demostrado gran eficacia  para prevenir o tratar la candidiasis
  • Los tests de microbioma vaginal. Hasta que haya estudios que los respalden, no se pueden considerar herramientas diagnósticas útiles.
  • El ácido bórico no regula el pH vaginal. Su uso solo está indicado en casos de candidiasis resistente a los tratamientos habituales, siempre bajo supervisión médica.

Cuándo considerar otras causas

Si el cultivo  para hongos es negativo pero sigues teniendo picor crónico, puede ser el momento de evaluar otras condiciones como:

  • Deficiencia de hierro o problemas tiroideos. Ambas pueden causar sequedad y prurito vulvar.
  • Enfermedades inflamatorias de la piel como el liquen escleroso o el liquen simple crónico.
  • Vaginosis bacteriana, que puede causar irritación y cambios en el flujo vaginal.

Conclusión

Si sientes que la candidiasis es un problema recurrente en tu vida, la clave es obtener un diagnóstico correcto antes de seguir probando tratamientos sin certeza. Un cultivo vaginal, una evaluación completa de tus síntomas y descartar otras causas subyacentes son pasos esenciales para encontrar la solución adecuada.